¿Qué personaje de ‘The Duke of Death and His Maid’ eres?
Sumérgete en el caprichoso mundo de "El Duque de la Muerte y su Criada" o como muchos lo conocen por su título original, "Shinigami Bocchan to Kuro Maid". Esta única comedia romántica ofrece la historia de un duque maldito, incapaz de tocar algo sin que perezca, y sus interacciones con una criada bastante descarada, Alice, y otros personajes intrigantes. La serie animada, adaptada del manga de Koharu Inoue, cautiva con su mezcla de comedia, romance y un toque de melancolía. ¿Alguna vez te has preguntado con qué personaje de este cautivador universo te identificas más? ¡Desplázate hacia abajo y presiona el botón de inicio para descubrir tu alter ego de anime!

Sobre The Duke of Death and His Maid en pocas palabras:
“El Duque de la Muerte y su Criada” (Shinigami Bocchan to Kuro Maid) narra la vida agridulce de un Duque maldito condenado a quitar la vida con tan solo tocar. Ambientada en una mansión aislada, él está acompañado por Alice, una criada juguetona, y Rob, un mayordomo dedicado. En medio de momentos cómicos, la serie aborda las profundidades de la conexión humana y el anhelo por la normalidad.
Conoce a los personajes de The Duke of Death and His Maid
Viktor
¡Viktor es ese noble serio que parece siempre a punto de soltar una frase filosófica y luego se ríe de sí mismo! Muy formal, pero con un sentido del humor raro que aparece en los peores (o mejores) momentos; a veces parece viejo alma, otras veces hace chistes de colegial. Le encanta el té —no sé por qué lo recuerdo con una cucharita rara— y tiene esa manía de ajustar su chaleco cuando está nervioso, que descubre que hace muchísimo. A veces frío, a veces excesivamente protector; vamos, que es complicado y por eso lo quieres.
Alice Lendrott
Alice es la definición de “te amo con todo y mi delantal”, pura entrega y energía; su ternura es casi una fuerza de la naturaleza. Se lanza a todo con entusiasmo, besos incluidos (literalmente), pero también tiene una paciencia de hierro para soportar dramas ajenos. Es dramática, sí, y muy romántica —a veces exagera, otras veces es la voz más sensata— y cocina muy bien, aunque jura que odia los pasteles y luego se come medio pastel en secreto. Tiene el corazón gigantesco y una terquedad adorable que la hace inolvidable.
Rob
Rob es la paleta de colores brillante en medio del castillo: bromista, relajado y siempre con una sonrisa que desarma. Es el amigo fiel que aparece con soluciones raras (y a veces medio peligrosas) pero que, francamente, funcionan —no siempre legalmente, pero funcionan. Le encanta fastidiar a la gente a quien quiere, y puede pasar de payaso a compañero serio en un parpadeo; sus prioridades cambian según el día y quizá según el pastel del momento. Es de esos tipos que dicen “tranqui” y en el fondo están pasando lista a todo para protegerte; sí, contradictorio y encantador.
Viola
Viola es pura chispa y malicia en el mejor sentido: le encanta provocar y hacer drama, pero siempre con estilo. Es juguetona, un poco manipuladora, y tiene una confianza aplastante que intimida y seduce a partes iguales; si quiere algo, lo consigue, a veces sin que te des cuenta. También tiene una vena cariñosa escondida bajo capas de sarcasmo, y sorprende porque de vez en cuando hace cosas increíblemente consideradas (como cuando menos te lo esperas). Es elegante y un poquito peligrosa, lo que la hace adictiva.
Walter
Walter es el mayordomo serio que guarda más secretos de los que admite; taciturno, impeccable y con una mirada que pesa. Profesional hasta el hueso, pero con detalles suaves —come galletas a escondidas, o eso juraría— y una paciencia infinita para todo el caos que le rodea. Cuando habla es para dar en el clavo, aunque su humor negro aparece en momentos totalmente inapropiados (y te ríes igualmente). Es el tipo en quien confías cuando la cosa se pone fea, aunque te provoque esa mezcla de respeto y miedo.
Caph
Caph es la chispa creativa, un poco excéntrico, mitad mago/desastre y mitad genio incomprendido; siempre tiene inventos raros y explicaciones demasiado largas. Le fascinan los misterios (especialmente los que implican maldiciones y experimentos peligrosos), y lleva gafas grandes o algo así —o tal vez fueron lentes de contacto?—, en fin, le queda. Muy apasionado y curioso, pero también desordenado emocionalmente, se enreda en sus propios planes y aun así sale adelante a fuerza de empeño. Es divertido y entrañable, aunque a veces parece que vive en otra dimensión.
Zain
Zain es ese tipo glacial por fuera y cálido por dentro, elegante como una estampa y con una mirada que guarda mil historias. Experto en combate, silencioso y con un pasado que claramente pesa, pero tiene momentos ridículamente tiernos que te derriten (sí, no pegan, lo sé). Le gustan las flores —rosas, supongo, o tal vez lirios; la cosa es que tiene un lado romántico muy suyo— y alterna entre la soledad voluntaria y ser el alma de una velada, según el humor. Es misterioso, con principios firmes y una lealtad que da miedo (en el buen sentido).
