Sobre Saga of Tanya the Evil en pocas palabras:

“La saga de Tanya la malvada” es una cautivadora serie de anime ambientada en un universo alternativo envuelto en guerra. Se centra en Tanya Degurechaff, un empresario reencarnado que navega por la vida militar, utilizando astucia y magia para lograr sus objetivos en medio del caos.

Conoce a los personajes de Saga of Tanya the Evil

Tanya Degurechaff

¡Tanya es un torbellino en miniatura con cerebro de comandante y corazón… bueno, con una cuenta enojada con Dios, literalmente! Fría, implacable y asquerosamente eficiente en la guerra, cada movimiento suyo parece calculado cinco pasos por delante, y a la vez ronca de vez en cuando (no sé por qué lo recuerdo, pero lo hago). Tiene esa mezcla ridícula de perfeccionismo militar y un gusto secreto por la papelería bonita —sí, la versión más temible del ejército con carpeta con stickers—; dice que detesta los sentimientos pero a veces los protege con más celo que a su uniforme. Es imposible que no te impresione; y sí, a veces parece una niña con genio de la estrategia y otras un cálculo de hierro, contradicciones incluidas, y mejor así.

Viktoriya Ivanovna Serebryakov (Visha)

Visha es la calma que acompaña la tormenta: leal, silenciosa y letal en el momento justo, pero siempre con una paciencia que casi asusta (en el buen sentido). Tiene esa mirada tranquila que cree que no necesita hablar, y sin embargo gestiona a Tanya como si fuera su sombra con sentido del humor propio —no siempre lo demuestra, pero lo tiene—. Es dulce cuando quiere, rígida cuando hace falta, y hay algo casi maternal en la forma en que mira al grupo, aunque a veces le da por comportarse como una adolescente terca y eso te sorprende. Ah, y le gusta el té: no sé si eso cuenta como arma, pero la memoria de una taza compartida la vuelve indefectiblemente humana.

Erich von Rerugen

Erich es el prototipo de oficial veterano: meticuloso, serio y con esa barba que debería tener su propio escuadrón de respeto, o al menos una medalla por paciencia. Es uno de esos tipos que conoce la burocracia militar casi como arte, y aún así cuando hay que pelear sale con la misma calma con la que ordena expedientes (alguna vez vi que colecciona relojes, o tal vez fue cucharas, no me acuerdo, pero guarda cosas raras). Tiene un lado sorprendentemente paternal que aparece en los momentos raros —se comporta como un abuelo estricto pero que te sorprende con galletas—, y a la vez mantiene esa distancia profesional que lo hace indispensable. Es fácil confiar en él hasta que te recuerda que esto es la guerra y que no hay finales felices garantizados.

General Zettour

Zettour es un estratega con voz de trueno y ego digno de las mejores historias militares; piensa dos veces y ataca una, y cuando habla la sala se queda muda (a veces literalmente, ok, eso fue exagerado, pero se nota). Es orgulloso, elegante en su propio estilo pétreo, y tiene la costumbre extraña de escuchar ópera antes de firmar órdenes —o eso dicen, o tal vez es solo una anécdota que le inventaron—. Puede ser inspirador hasta la náusea y terriblemente obstinado cuando se enamora de una idea, lo que lo convierte en oro y en peligro a la vez; además, tiene una risa seca que no parece encajar con su uniforme impecable. Es el tipo al que temes darle la última palabra… y a la vez confianza: alguien tiene que tomar decisiones imposibles, ¿no?

Loria

Loria es ese personaje envuelto en misterio y terciopelo, con sonrisa enigmática y agenda propia; parece que siempre sabe más de lo que dice y por eso fascina y frustra a la vez. Tiene estilo, manipula información (y a veces a gente, sin mucha culpa manifiesta), y viste como si cada día fuera un acto teatral —o tal vez simplemente le gustan las bufandas, no lo sé, a veces contradigo lo que pienso—. Hay un lado amable, casi conspirativo, que aparece en pequeños gestos: te pasa una nota o te da un lugar seguro sin mucha explicación y ya estás en deuda. En resumen, encantadora, peligrosa y adorable por partes iguales; no confíes demasiado, pero tampoco te pierdas su compañía.