Sobre Good Girls en pocas palabras:

Good Girls es una serie de televisión estadounidense que sigue a tres madres que luchan por llegar a fin de mes. Cuando una de ellas se encuentra en una situación desesperada, deciden robar una tienda local. Sin embargo, las cosas se complican cuando descubren que la tienda es propiedad de un peligroso criminal y se ven envueltas en una peligrosa red de delitos y corrupción. Con un elenco estelar y una trama emocionante, Good Girls es una serie que no te puedes perder.

Conoce a los personajes de Good Girls

Beth Boland

Beth es como la madre suburbana que se convirtió en jefa de una operación ilegal y todavía hornea galletas para la vecindad, es totalmente contradictoria y por eso la amo. Firme, controladora y con un instinto casi maternal pero también fría cuando hace falta, tiene una especie de brújula moral torcida que funciona a su manera. Le encanta el orden (o eso dice) y sin embargo su vida es un caos glorioso; jura que no le gustan las sorpresas y luego improvisa planes locos a mitad de la noche. Siempre está cuidando a su familia, aunque a veces eso signifique convertir la cocina en un cuartel general secreto — y seguro que tiene una taza favorita con una mancha que nunca lava.

Annie Marks

Annie es pura ansiedad con una pizca de valentía inesperada; parece inocente y torpe pero es la que hace que las cosas pasen (y a veces se arrepiente en la siguiente hora). Tiene un sentido de la justicia raro, ama las reglas pero también las dobla con creatividad nerviosa cuando la presión aprieta; y sí, colecciona bolígrafos como si su vida dependiera de ello. Es súper empática, se culpa por todo y luego sorprende rompiendo ventanas o tomando decisiones que nadie hubiera esperado — dramática pero adorable. A veces habla como si fuera a pedir permiso y otras veces actúa como si ya tuviera el título, y eso la hace totalmente humana.

Ruby Hill

Ruby es el tipo de amiga que te cubre las espaldas sin hacer preguntas y luego te suelta un comentario ácido que te vuelve a la realidad, la mezcla perfecta de lealtad y sarcasmo. Super práctica, no se anda con florituras, organizada hasta el punto de obsesión (pero claro, también tiene un cajón secreto con cosas ridículas). Tiene talento para los negocios y no le da miedo mancharse las manos, aunque secretamente adore las cosas bonitas — pendientes de perlas con zapatillas de deporte, juro que es cierto. Es directa, protectora con su familia y con una paciencia límite que se agota rápido; cuando explota, mejor correr.

Stan Hill

Stan es ese hombre que aparenta ser el pilar tranquilo del barrio pero guarda frustraciones que a veces se le escapan en comentarios torpes; padre serio, a ratos demasiado directo. Ex policía, aún carga con el sentido del deber y la vergüenza profesional, pero también tiene momentos de ternura inesperada — le gustan las plantas y habla con ellas, no se ría. Es protector hasta la médula, un poco terco y a veces cabeza dura, aunque flojea como cualquier humano cuando la familia está en juego. Tiene ese encanto despreocupado de quien cree saberlo todo y termina aprendiendo en el camino, rara vez admite errores pero yo se los perdono.

Sara Hill

Sara es la adolescente que parece desafiante pero en realidad está intentando entender el mundo, con una mezcla de cinismo y sensibilidad que te corta el aliento. Rebelde, inteligente y con un humor negro que le encanta usar en el peor momento posible; colecciona canciones tristes y memes raros, sí, me encanta. Se siente desarraigada y a la vez ferozmente leal a los suyos, actúa como si nada le importara pero se preocupa demasiado — contradicción clásica de juventud. Tiene un lado peligroso cuando se siente traicionada, y también un lado adorable cuando cocina (o quema) brownies para la familia.

Rio

Rio es magnético, peligroso y con una moral propia que cambia según el día; es la definición de encanto tóxico con corazón — o algo así. Es manipulador, sí, pero también sorprendentemente protector con quienes considera su familia; a veces brutal, a veces dulce, me vuelve loco. Tiene reglas raras, principios que él mismo se inventa y una sonrisa que desarma hasta al más listo; y curiosamente tiene manías como contar las servilletas en la mesa, no sé por qué. Es impredecible y eso lo hace tanto aterrador como fascinante; te juro que hay momentos en que parece capaz de amor verdadero, o al menos de lealtad intensa.

Dean Boland

Dean empieza como ese esposo relajado y un poco ingenuo que siempre intenta mantener la paz, pero no se equivoquen: tiene más capas de las que aparenta. Cariñoso y a veces demasiado confiado, quiere lo mejor para su familia y suele ser el alivio cómico, aunque también toma decisiones cuestionables cuando lo presionan. Es buen tipo, práctico y con un sentido del deber que a veces lo atrapa en problemas; cultiva plantas, habla de fútbol y tiene una corbata que nunca usa pero conserva. A ratos torpe, a ratos sorprendentemente firme, siempre está intentando recomponer lo que se rompe alrededor suyo — y a veces lo logra, a su manera.

Ben Marks

Ben es el tipo de papá que intenta ser correcto, sensible y estable, aunque la vida lo arrastra a meterse en líos por amor o por poner buena cara. Protector con Annie y con la familia, pero con inseguridades que aparecen en los peores momentos; es cariñoso y torpe y a veces sabotea sus propias decisiones por miedo. Tiene un sentido del humor raro, colecciona camisetas viejas y tiene un talento secreto para arreglar cosas — o eso cree —; también se preocupa demasiado por lo que piensen los demás. En resumen, es bueno, imperfecto, un poco perdedor a la vez que entrañable, y cuando se enoja realmente duele, pero rara vez lo verás venir.