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¿Cuál es tu gemelo malvado en ‘Rick y Morty’?

¿Eres fanático de la serie 'Rick y Morty'? Si es así, seguramente te habrás preguntado alguna vez si tienes un gemelo malvado en otra dimensión. ¡Pues ahora puedes averiguarlo! Con este divertido quiz, podrás descubrir quién es tu gemelo malvado en el universo de 'Rick y Morty'. ¿Será un ser despiadado y cruel como Evil Morty? ¿O quizás un genio loco como Rick? Solo hay una manera de descubrirlo: ¡comenzar el quiz ahora mismo! No esperes más y descubre quién es tu alter ego en otra dimensión. ¡Haz clic en el botón Comenzar para comenzar la aventura!

Bienvenido al cuestionario: ¿Cuál es tu gemelo malvado en Rick y Morty?

Sobre Rick and Morty en pocas palabras:

Rick and Morty es una serie de televisión animada estadounidense que sigue las aventuras de un científico loco, Rick, y su nieto, Morty. Juntos viajan a través de diferentes dimensiones y universos, experimentando situaciones absurdas y peligrosas. La serie es conocida por su humor negro, su crítica social y su complejidad temática. Los personajes son muy queridos por los fanáticos, y la serie ha ganado varios premios, incluyendo un Emmy. Rick and Morty es una serie única y emocionante que atrae a una amplia audiencia.

Conoce a los gemelos malvados de Rick y Morty

Krombopulos Michael

Krombopulos Michael es el asesino más feliz que vas a conocer en Rick y Morty; lo juro, siempre vende su “trabajo” con una sonrisa que da escalofríos. Tiene un sentido del humor raro y una ética laboral impecable (sí, ética para un criminal, no lo pienses demasiado). Es encantador de una forma incómoda y sorprendentemente profesional, aunque a veces habla como si fuera un vendedor de seguros —lo cual, en el fondo, tiene sentido—. Ah, y curiosamente parece que le gusta comprar cosas lindas… o eso recuerdo, podría estar inventándome eso ahora.

Scary Terry

Scary Terry es básicamente Freddy Krueger pero más tragicómico y con problemas de autoestima, jaja, en serio, es terror y terapia a la vez. Ama sus cuchillas y su ritmo de psicópata de pesadilla, pero también se queja mucho y tiene una tremenda debilidad por su familia (créanme, lo ves una vez y lo sientes). A veces es cruel, otras veces es ridículamente patético; esa mezcla lo hace entrañable y aterrador en proporciones iguales. Y tiene un suéter raro, ¿o era una manta? Bueno, algo peludo en cualquier caso.

The Devil

El Diablo en Rick y Morty no es el demonio clásico: es más como un funcionario elegante de la condena eterna, con traje y chistes malos. Le gusta manipular contratos (siempre revisa la letra pequeña) y se deleita en poner pruebas retorcidas, pero también puede ser un anfitrión sorprendentemente educado. Hay algo teatral en él, como si estuviera en un show de variedades donde la pena eterna es el número final. En realidad a veces parece un poco aburrido, lo que lo hace todavía más peligroso porque se ocupa en hobbies extravagantes.

Snowball

Snowball (antes conocido como Snuffles, sí, el perro) es un genio con una mini armadura y una ambición expansiva: planea, organiza y gobierna con patas. Es divertido porque uno lo imagina ladrando órdenes serias pero también persiguiendo bolas de lana en sus ratos libres —no sé si eso pasa pero me gusta imaginarlo—. Tiene esa combinación de ternura canina y determinación total que te deja entre riendo y asustado. Y por favor, nunca subestimes su habilidad de ser adorable y letal al mismo tiempo.

Monster Beth

Monster Beth es la versión que resulta cuando el dolor y la curiosidad se mezclan: feroz, vulnerable y un poco caótica. Tiene garras y un lado protector (muy maternal a su manera), pero también se rebela contra todo lo que la encasilla, cosa que es tan confusa como genial. A veces actúa como una guerrera indomable, otras veces como alguien que solo quiere que la acepten con sus raros monstruo-trajes —sí, eso fue una imagen mental rara pero válida—. Y por si te lo preguntas, sí, puede entrar en crisis existenciales a la mínima.

Rick Sanchez

Rick es un desastre brillante: genio, egoísta, destrozado por dentro y con un alcoholismo épico que es casi un personaje secundario por sí mismo. Sus invenciones cambian universos, sus sarcasmos limpian salas y sus raras muestras de cariño te dan puñaladas de nostalgia (ok, dramatizo, pero es así). Es arrogante, auto-destructivo y sorprendentemente capaz de momentos de León y de niño asustado, todo en la misma escena. Ah, y siempre huele a misterio y a alcohol, aunque a veces también a fritura, no sé por qué digo eso.

Supernova

Supernova es el héroe galáctico sexy que a veces parece más interesado en su reflejo que en salvar planetas, pero ojo, también tiene un lado sensible. Es carismático a lo exagerado, con un ego luminoso (literal) y una historia complicada que se filtra por su sonrisa. A ratos es genuinamente valiente y otras veces dramáticamente inseguro —una telenovela espacial, básicamente—. Y tiene una capa que siempre está impecable, en serio, no sé cómo lo hace.

The Eyehole Man

The Eyehole Man es un personaje ridículamente perturbador y surrealista, mezcla de mascotita de canal y conspiración incómoda. Tiene esa vibra de producto televisivo que te obliga a mirar pero que podría estar planeando algo muy raro, tipo “sonríe y observa”. Es creepy con una mano de humor absurdo, y hay algo inquietantemente memorable en cada aparición suya. Además, siempre pienso que probablemente tiene snacks detrás del escenario, no sé por qué lo imagino así.

Evil Morty

Evil Morty es la versión silenciosa y calculadora del Morty que todos conocemos, y cuando aparece te das cuenta de que algo más grande está en juego. No es ruidoso ni dramático, es frío, estratégico y letal en su paciencia; peligroso porque piensa a largo plazo. Hay una sensación de tragedia en él, como si todo el cinismo tuviera raíces dolorosas, y por eso resulta fascinante y aterrador. A veces parece casi filosófico, y otras veces simplemente te mira como si supiera que perdiste.

Fart

Fart (sí, el ser gaseoso que canta) es lo más loco y hermoso: una entidad cósmica con ideales pacifistas y un tono musical que te pega en el corazón. Es a la vez adorable y absolutamente peligroso, porque su capacidad de borrar cosas es espectacularmente poética y letal. Habla en metáforas, canta sobre libertad y luego, bueno, podría destruir un planeta por accidente, así que equilibrio raro. Y tengo la certeza de que sería un buen amigo en una tarde rara, siempre que no haga un solo chirrido apocalíptico.