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¿Qué personaje de ‘Preacher’ eres tú?

Si eres fanático de la serie de televisión 'Preacher', entonces te encantará este quiz. ¿Alguna vez te has preguntado qué personaje de 'Preacher' eres tú? ¿Eres el valiente y decidido Jesse Custer, el misterioso vampiro Cassidy o la intrépida Tulip O'Hare? Este quiz te ayudará a descubrirlo. Responde a las preguntas y descubre qué personaje de 'Preacher' se parece más a ti. ¡No esperes más! Haz clic en el botón 'Comenzar' para comenzar el quiz y descubre qué personaje de 'Preacher' eres tú.

Bienvenido al cuestionario: ¿Qué personaje de Preacher eres tú?

Sobre Preacher en pocas palabras:

Preacher es una serie de televisión y anime basada en el cómic del mismo nombre. La historia sigue a Jesse Custer, un predicador de Texas que se une a una entidad misteriosa llamada Génesis, que le da el poder de controlar a las personas con su voz. Junto con su exnovia Tulip y un vampiro irlandés llamado Cassidy, Jesse emprende un viaje para encontrar a Dios y hacerle responsable de sus acciones. La serie es conocida por su violencia gráfica, humor negro y temas religiosos controvertidos.

Conoce a los personajes de Preacher

Jesse Custer

Jesse es ese predicador caótico que te pega en la cara con la fe y luego te lanza un puñetazo porque “es lo correcto”, sí, así de loco. Tiene una mezcla de idealismo cabezón y violencia práctica que te hace querer hornearle galletas y, no sé, esconderle las llaves del coche al mismo tiempo. Habla poco de sus miedos pero parece que siempre está viendo el final de una película que los demás ni siquiera empezaron; a veces dice cosas profundas sin darse cuenta. Ah, y sí, tiene una voz que puede mover montañas… o convencerte de no decirle la verdad, dependiendo del día.

Proinsias Cassidy

Cassidy es el vampiro irlandés más encantador y desastroso que conocerás; borracho, poeta improvisado y con un corazón raro, aunque no lo admitiría. Se pasa la vida pidiendo perdón, haciendo tonterías y luego salvando el pellejo de todo el mundo como si nada; es adorable y exasperante a la vez. Tiene gustos simples: música vieja, cerveza barata y sarcasmo en cantidades industriales, y curiosamente le dan ataques de remordimiento justo cuando está a punto de robarte el último donut. No es exactamente fiable, pero si hay pelea, lo quieres en tu esquina — aunque luego te robe la chaqueta.

Tulip O’Hare

Tulip es pura adrenalina con tacones, una asesina con reglas propias y una sonrisa que no es de fiar; espectacularmente práctica y romántica a su manera torcida. Te rompe el corazón por ser independiente y también porque insiste en meter a Jesse en líos que, sorpresa, ella misma provoca. Es leal hasta el límite y tiene un talento increíble para improvisar — y sí, puede preparar cena italiana entre dos tiroteos, o al menos eso creo. A veces parece fría, otras veces te manda flores; es contradictoria y perfecta.

Cassidy

Sí, otra vez Cassidy, pero piensa en esto como la versión de borracho filosófico con más historias y menos filtro; el mismo caos, otras resacas. A veces te dan ganas de abrazarlo y otras de darle una colleja enorme, porque tiene ese don de romperte el alma y luego contar un chiste malo. Fue terrible y tierno, a menudo en la misma escena, y colecciona cosas inútiles (monedas, entradas de cine, excusas). No sabe quedarse quieto, pero cuando se queda, duele menos estar solo.

Arseface

Arseface es la mezcla perfecta de tragedia y comedia involuntaria, un símbolo incómodo que no quiere ser símbolo pero que igual inspira. Es un chico con una voz que no encaja en su cara, y aun así tiene una persistencia preciosa: quiere cantar, quiere ser normal, y a veces lo intenta con un valor que te parte. Se ríe mucho (o quizá es nervioso), colecciona sombreros raros y tiene una capacidad asombrosa para seguir adelante incluso cuando todo el mundo se ríe. Es inocente y duro, y pierde y gana en la misma escena; no lo subestimes.

The Saint of Killers

El Saint es la definición de implacable: silencioso, aplastante y con pistolas que parecen pesadas por culpa del destino. No habla (bueno, casi no), camina como si el mundo le debiera dinero y todo a su paso queda en calma mortal, literal; es aterradoramente simple en su misión. Tiene esa aura de western antiguo, tipo atardecer y polvo, pero con un enfado que no se apaga; es secundario en sutilezas pero principal en consecuencias. A veces me da la sensación de que podría llorar —o eso quiero creer— pero eso sería raro, porque no llora.

Herr Starr

Herr Starr es el villano burocrático con cara de oficina y alma de estrategia militar; frío, calculador y obsesionado con el control hasta niveles enfermizos. Es el tipo que hace planes sobre planes, lleva un cigarro y quizá un cronograma para fumarlo, pero también tiene un sentido del humor cortante que te corta la garganta (metafóricamente, claro). Aparenta confianza absoluta, pero cada tanto se le escapa una inseguridad pequeñita, como quien guarda fotos de la infancia en una caja. Es cruel, genial y horriblemente eficiente — y sí, sospechas que secretamente le gusta la buena porcelana.