Sobre The Librarians en pocas palabras:

The Librarians es una serie de televisión estadounidense que sigue las aventuras de un grupo de bibliotecarios que protegen reliquias mágicas y luchan contra fuerzas sobrenaturales. La serie es una continuación de las películas de televisión de The Librarian y cuenta con un reparto de personajes diversos y divertidos. Cada episodio presenta una nueva misión en la que los bibliotecarios deben resolver acertijos y enfrentarse a peligros para salvar el mundo. La serie combina elementos de fantasía, ciencia ficción y aventura para crear una experiencia emocionante y entretenida para los espectadores.

Conoce a los personajes de The Librarians

Eve Baird

Eve es la guardiana implacable que todos quieren en una pelea y en la fila para boletos (sí, es de las que se adelanta pero con estilo). Exmilitar, reglas claras, mirada que te pone en tu sitio en dos segundos, pero también sorprende porque colecciona pequeñas macetas de suculentas —no preguntes por qué, ella no lo explica—. Lidera con firmeza pero tiene momentos de ternura que te derriten si la conoces lo suficiente; a veces parece dura y otras veces se ríe con una facilidad que confunde. Es protectora hasta la médula y, spoiler, a veces olvida dónde dejó el teléfono aunque controle la seguridad de artefactos mágicos.

Jacob Stone

Jacob es el músculo del equipo pero no de la manera aburrida: es arqueólogo, amante del arte y de los martillazos (literalmente y figuradamente). Pone el pecho por sus amigos, adora los rompecorazones históricos y colecciona herramientas antiguas como si fueran joyas —y sí, a veces le canta a las estatuas, no es broma—. Tiene esa mezcla rara de bruto intelectual: habla de filosofía mientras arregla una puerta con un pico. Es dulce, leal y sorprendentemente sensible (llora en películas cursis y niega haberlo hecho, claro).

Cassandra Cillian

Cassandra es el cerebro caótico y precioso del grupo: genio literal con ayudas y límites, memoria fotográfica y ansiedad que a veces la deja paralizada (y otras la vuelve imparable). Es brillante en matemáticas, neurociencia y en romper esquemas; también toca el piano de forma impecable cuando se acuerda de afinarlo. A veces habla como si estuviera en 2030 y otras olvida su taza de té en la nevera —contradicciones, bienvenidas—. Tiene un corazón enorme bajo toda esa maraña de ideas, y su humor es tan seco que a veces no sabes si está bromeando hasta que te golpea la risa.

Ezekiel Jones

Ezekiel es el ladrón encantador que roba cosas, corazones y planes maestros con la misma naturalidad; glamuroso, tramposo y eternamente con un truco bajo la manga. Maestro de la tecnología, ilusiones y estafas artísticas, adora los gadgets brillantes y los sombreros raros (tiene una colección, juraría que uno tiene una pequeña luz). Se jacta, flirtea y se hace el independiente, pero es absurdamente leal —y sí, guarda post-its con notas de cumpleaños de todo el equipo, aunque lo niegue—. Es el tipo que entra por la ventana porque la puerta estaba demasiado… aburrida.

Jenkins

Jenkins es la encarnación del bibliotecario eterno: seco, cultísimo y con un archivo para cada problema (literalmente, tiene un archivo para las cosas que aún no existen). Sabe más de reglas que cualquier universidad y sin embargo se permite curiosidades infantiles como coleccionar cucharas —o era tazas?—; a veces se contradice, como todo ser muy viejo y exhaustivamente sabio. Es estricto pero profundamente afectuoso, el que te regaña y al minuto siguiente te está preparando té como si nada, y siempre tiene un pasado misterioso que suelta a cuentagotas. Tiene esa mezcla perfecta de exasperante formalidad y ternura imprevista que lo hace imposible de no querer.