Sobre Akame Ga Kill! en pocas palabras:

Akame Ga Kill! es una serie de anime y manga que sigue la historia de Tatsumi, un joven que llega a la capital del Imperio para unirse al ejército y ganar dinero para su aldea. Sin embargo, pronto descubre la corrupción y la maldad del gobierno y se une a un grupo de asesinos llamado Night Raid para derrocar al emperador y restaurar la justicia en el país. La serie está llena de acción, drama y giros inesperados, y presenta personajes complejos y emocionantes batallas.

Conoce a los personajes de Akame Ga Kill!

Prime Minister Honest

¡Ah, el malvado en traje perfecto! Prime Minister Honest tiene esa sonrisa fría y esa manera de hablar que te hace creer que todo está bien… hasta que no lo está, claro. Es el clásico manipulador en la sombra: corrupto, encantador y con un gusto ridículamente refinado por los perfumes caros (sí, guarda miniaturas en su escritorio, lo juro). A veces parece casi paternal con la gente —pero en realidad disfruta del poder más de lo que admitiría— y tiene esa tranquilidad espeluznante que te pone los pelos de punta.

Mine

Mine es pura energía comprimida en una francotiradora súper explosiva; pequeña pero mortal, literalmente. Tiene ese temperamento tsundere que te hace reír y llorar a la vez: agresiva, celosa, y con un corazón enorme que se esconde detrás de la rabia (y de grandes gafas, o a veces sin ellas, depende de la escena). Le encanta la moda rosa y las armas enormes que van con su personalidad exagerada, y su puntería es criminalmente precisa —con una risa maniática cuando se enfada—. Es tierna en momentos raros (sí, se le cae la coraza a veces) y te sorprende con dulces cuando menos te lo esperas.

Bols

Bols es el tipo serio y contundente que da la sensación de “no hables, sólo hazlo”, con músculos, lealtad y un pasado que pesa. Tiene esa voz grave y la manera de ser de alguien que cree en el deber más que en las palabras —pero también tiene gestos sorprendentemente dulces hacia sus compañeros (o hacia una taza de té, no estoy seguro, ¿té o sopa?). A veces parece brutal y otras veces casi adorablemente torpe, como si fuera un oso con medallas; lee pocas cosas pero observa mucho. Lo ves en combate y piensas “ok, eso duele”, pero también lo verías arreglando un zapato viejo por costumbre o por orgullo raro.

Leone

¡Leone es la energía pura! Salvaje, cariñosa, un desastre adorable y absolutamente feroz en la pelea; es la amiga que te abraza y luego te parte la mandíbula si hace falta. Le encanta comer (siempre hambre) y tiene ese sentido de la justicia propio de quien protege a los suyos a puñetazos; además es increíblemente rápida y feroz, tipo gato grande con actitud. Tiene bromas malas, una risa contagiosa y, sorpresa, sentimientos profundos que aparecen cuando menos lo esperas (y sí, es muy peluda, o no, depende del día). Es cariñosa y peligrosa a la vez, y por eso todos la adoran.

Kurome

Kurome es una mezcla rarísima de dulzura y locura; a veces parece una hermanita juguetona y luego se vuelve letal con una sonrisa infantil, es inquietante en el mejor sentido. Hay algo trágico en ella, como si la sonrisa fuera una máscara (o al revés, quién sabe) y sus recuerdos se tropiezan con su rencor —pero también muestra gestos que te parten el alma, como cuidar flores o algo así, ¿me equivoco?—. Usa técnicas inquietantes y tiene una estética que no olvidas: fría, teatral y, de pronto, muy cercana. Es contradictoria a propósito, y eso es lo que la hace fascinante.

Akame

Akame es la asesina silenciosa con una mirada que lo dice todo; fría, eficiente y con un código moral que te rompe el corazón cuando lo entiendes. No habla mucho pero cada acto suyo pesa toneladas: es leal hasta el punto de sacrificio y tiene una habilidad letal que asusta, aunque luego la ves cocinando en un momento raro y piensas “espera, ¿esto es la misma persona?”. Su relación con su pasado y con su hermana (dos palabras: tragedia y culpa) añade capas que no se resuelven jamás, y su calma es casi un volcán contenida. Es elegante y mortal, y a veces te regala una sonrisa tan pequeña que te derrite.

Seryu Ubiquitous

Seryu es el epítome del fanatismo por la “justicia”, pero llevada al extremo —y con una adorable fijación por la pureza que da miedo. Tiene una voz infantil o un tono aparentemente inocente que contrasta con la violencia brutal que puede desatar: es como una muñeca explosiva que cree que todo es blanco o negro. Ama a sus compañeros (o a su robot-gato-¿perro? ¡esa cosa!) con una devoción casi religiosa y tiene ideas de justicia que te hacen arquear la ceja y luego decir “bueno, tiene sentido… hasta cierto punto”. A veces parece ingenua y a veces es terroríficamente calculadora; le gustan los conejitos, pero también las armas gigantes.

Dr. Stylish

Dr. Stylish es el villano con glamour: elegante, refinado, y absolutamente obsesionado con la estética del horror. Es ese tipo de científico que mezcla arte y tortura, con traje impecable, guantes y un gusto por las maniobras quirúrgicas que te pone los pelos de punta (también colecciona cosas raras, no preguntes). Tiene un sentido del humor muy seco y disfruta como un niño con juguetes caros: instrumentos, modificaciones, y un placer casi artístico en lo macabro. Al mismo tiempo puede mostrarse encantador y civilizado, y luego lo ves arreglando cadáveres como si fueran muñecos de porcelana —espeluznante y elegante, siempre.

Sheele

Sheele es la gigante adorable con tijeras aún más grandes —torpe, tierna y con un sentido de culpa gigantesco que me parte el corazón. Es la amiga que se asusta por todo y sin embargo se lanza al peligro por sus compañeros sin pensarlo mucho; tiene una sensibilidad enorme y una asombrosa habilidad que viene en contraste con su personalidad tímida. Llora con cualquier cosa triste, come dulces como terapia y dice cosas despistadas, pero en combate sus tijeras hacen su trabajo con una precisión que nadie espera. Es dulce, un poco despistada y peligrosamente letal; y sí, siempre parece olvidar las llaves o dónde dejó la tijera.

General Liver

General Liver es ese militar viejo y duro que vive para el deber y las órdenes; serio, calcificado en disciplina pero con destellos de humanidad que salen cuando menos te lo esperas. Tiene cara de few words, muchas medallas y una postura que dice “no me metas en problemas”, pero también hay en él un orgullo nacionalista que lo hace temible. A veces da la impresión de ser estrictamente profesional y otras veces se le ve pensando en tiempos mejores, como un veterano con cicatrices internas (y externas). Es imponente, estratégico y a la vez un poquito melancólico; le falta sonrisa pero la tendría en secreto, probablemente.

Chelsea

Chelsea es la camaleónica, la actriz que vive por la mentira útil: transformista, coqueta y terriblemente útil en infiltraciones. Le encanta jugar con identidad, ropa, y voces —y lo hace con una facilidad que da vértigo; un momento es dulce y al siguiente cortante como un bisturí. Tiene un lado juguetón que se mezcla con una habilidad letal para pasar desapercibida o volverse alguien completamente distinto, y aunque a veces parezca cobarde, en el clímax saca valor de donde nadie lo esperaba. Es encantadora, un poco teatral y sorprendentemente profunda si le preguntas por sus máscaras (pero probablemente no le preguntes, ella ya te respondió con otra voz).