Sobre Beastars en pocas palabras:

Beastars es una serie de anime y televisión que se desarrolla en un mundo donde animales antropomórficos conviven. La trama gira en torno a un lobo llamado Legoshi, quien se enamora de una coneja llamada Haru. La serie explora temas como la discriminación, la violencia y la identidad, y sigue la vida de Legoshi mientras intenta descubrir quién es realmente y cómo puede encontrar su lugar en el mundo. La serie es conocida por su animación impresionante y su narrativa emocionalmente compleja.

Conoce a los personajes de Beastars

Louis

¡Louis es puro drama y dignidad, en serio, el rey de las miradas intensas! Siempre tan controlado y altivo, pero si lo miras bien tiene mil grietas emocionales que se le asoman cada cinco minutos —lo que lo hace insoportablemente fascinante—. Es líder nato, exigente y perfeccionista, y también un poco teatral, como si cada entrada fuera una escena de teatro (porque, eh, probablemente lo planeó). Ah, y tiene ese ego gigantesco que a veces choca con su inseguridad, sí, contradictorio pero real.

Rokume

Rokume tiene esa vibra misteriosa y un pelín perturbadora, ¿no? Callada a ratos y luego suelta frases que te dejan pensando horas, como si viviera en otra frecuencia; además parece tranquila pero no te fíes, tiene coraje. Es de esas que ayudan sin querer que la gente se pregunte si hay algo más detrás; también come cosas raras o, espera, ¿era que colecciona cosas pequeñas? En fin, tiene capas, seguro, muchas capas y un pasado que te encantaría revisar con una taza de té.

Gohin

Gohin es el maestro raro y serio que se aparece para darte una lección de vida que no pediste pero necesitabas. Es metódico, duro y sorprendentemente paternal aunque a veces parezca un tipo seco; tiene ese código moral que lo hace casi impenetrable, y a la vez tiene gestos extraños que humanizan todo (como acariciar cosas con una concentración inquietante). Le gusta la disciplina, la paciencia y las medicinas raras, o sea, no es el típico buenazo, pero cuida a los que le importan como nadie. Oh, y tiene frases filosóficas guardadas en la manga —y probablemente un ritual raro los domingos—.

The Mayor

El Alcalde es todo fachada pública, sonrisa obligatoria y decisiones que huelen a cálculo político (pero con glamour, claro). Se nota que vive por la imagen y el protocolo, aunque a veces muestra un lado sorprendentemente blandito y hasta ingenuo, lo que confunde mucho. El puesto lo consume, para bien y para mal; sus discursos suenan perfectos pero detrás hay mil tramas, o al menos eso cree la gente del barrio. Ah, y tiene como un hobby secreto que nadie sospecharía, o eso dicen; conspiraciones, chismes y un abrigo caro son su combo.

Juno

Juno es fuego y acero, ambiciosa, feroz y con una lealtad que no se negocia (pero ojo, también puede ser terco-obsesiva, no es todo nobleza). Tiene una presencia imponente, deportista y con una vena romántica rara que aparece cuando menos te lo esperas —sí, puede ser todo corazón y luego clavarte una mirada asesina—. Le encanta competir y tiene orgullo, pero a la vez se derrite con gestos sinceros aunque lo niegue mil veces. Y tiene manías adorables, como hablar sola cuando está nerviosa; la ves seria y luego se pone a practicar discursos frente al espejo, lo juro.

Pina

Pina es ese personaje que parece tranquilo pero guarda secretos como si fueran pastillas en el bolsillo, muchos contrastes ahí. Es práctico, directo y a veces sorprendentemente dulce —sí, dulce pero con borde—, además de tener una manera muy particular de resolver problemas que implica menos palabras y más acciones. No se asusta fácil, aunque a veces flaquea en cosas pequeñas y luego se siente culpable por cosas que nadie nota; contradicciones claves. Y tiene una risa extraña que sale cuando menos conviene, lo que la hace encantadora y un poco impredecible.

Haru

Haru es complicada y adorable en la misma frase, una mezcla de vulnerabilidad y frialdad que hipnotiza. A veces parece fantasiosa y soñadora, y al rato fría y calculadora; no sabías si abrazarla o huir, ¿entiendes? Le gustan las cosas bonitas, los detalles absurdos y tiene un ego silencioso que la protege, además de un coraje inesperado cuando la situación lo pide. Ah, y colecciona objetos diminutos que nadie entiende —¿por qué tiene eso?—, típico Haru.

Collot

Collot es suave en la voz pero con una mente astuta, tranquilo pero con ironías internas que le hacen sonreír por dentro. No es el más llamativo, pero tiene ese encanto discreto que hace que la gente le confíe secretos; parece tímido y luego suelta observaciones que te atraviesan, uy. Tiene gustos refinados y un sentido estético raro, a veces contradictorio con su timidez: le encanta ser el centro sin querer ser notado. Y sí, colecciona libros o fotos raras, o tal vez solo le gustan las sombras, no sé, lo recuerdo mal.

Legoshi

Legoshi es el gran corazón atormentado, siempre en conflicto y con una ternura enorme que te desarma en segundos. Es tímido, reflexivo y a veces demasiado autoconsciente, pero también tiene una fuerza contenida que aparece cuando menos esperas; es básicamente un gigante sensible con sentido del humor involuntario. Le gusta observar, entender, proteger, aunque eso lo ponga en situaciones raras —y sí, tiene fobias pequeñitas que contradicen su aspecto. Ah, y su gusto por la comida rara o por las cosas suaves es desesperantemente agradable, me encanta.

Jack

Jack es ese amigo eterno, buenazo, un torbellino de energía positiva, aunque a veces un poco ingenuo y propenso a meterse en líos por su tamaño de corazón. Le encanta divertirse y ser leal hasta el gesto más ridículo, tipo aparecer con una camiseta ridícula para levantar ánimos. Tiene un lado protector que sorprende porque parece despreocupado, y luego te salva el día sin pensarlo dos veces; contradicción adorable total. Y además tiene manías tontas, como tararear canciones raras cuando está nervioso —es imposible no sonreírle.