Sobre Fire Force en pocas palabras:

Fire Force es una serie de anime que se centra en un mundo donde los humanos pueden controlar el fuego y se enfrentan a demonios que causan incendios. La historia sigue a Shinra Kusakabe, un bombero de la Brigada 8 que tiene el poder de controlar sus pies en llamas y corre a velocidades increíbles. Junto con sus compañeros de la Brigada 8, Shinra lucha contra los demonios y descubre un complot más grande detrás de los incendios. La serie combina acción emocionante con un misterio intrigante y personajes interesantes.

Conoce a los personajes de Fire Force

Arthur Boyle

Arthur es puro dramatismo con una espada imaginaria que él jura que es real (y a veces casi lo es). Tiene ese orgullo adorable de caballero desfasado: valiente, terco y con una confianza que roza lo cómico; pero ojo, también es sorprendentemente leal y tierno cuando importa. A veces se comporta como si viviera en una novela medieval y otras veces olvida cosas básicas, como dónde dejó su espada… o su casco. Me encanta que sea un héroe que también puede ser ridículo, en el mejor sentido.

Shinra Kusakabe

Shinra es esa mezcla de fuego literal y determinación inquebrantable — súper idealista, directo y con esa sonrisa que parece siempre a punto de explotar (en el buen sentido). Tiene un pasado duro que pesa en sus hombros pero nunca pierde la voluntad de proteger a la gente, aunque a veces sea torpe con emociones y palabras. Puede parecer serio y frío para algunos, pero luego hace algo totalmente empático y te derrite (y sí, hay momentos incómodos con el humor involuntario). Ah, y sus dientes —la “sonrisa del diablo”— forever memorable.

Sho Kusakabe

Sho es el hermano que te hace cuestionarlo todo: tranquilo, calculador y con una presencia que hiela y fascina al mismo tiempo. No es raro que parezca distante o misterioso, pero tiene capas, motivaciones retorcidas y una convicción que a veces raya en lo fanático; complicado pero magnético. Hay quien lo odia y quien no puede dejar de mirarlo; además, tiene una estética impecable y un gusto por lo teatral que me flipa. De vez en cuando muestra un momento raro de vulnerabilidad y uno piensa “¿realmente hay algo más detrás?” —spoiler: siempre hay algo.

Haumea

Haumea es la villana que disfrutas odiar: ingeniosa, manipuladora y con un look tan cool que podría tener su propia línea de ropa. Tiene una mezcla de sarcasmo y crueldad fría, pero también momentos que dejan entrever una inteligencia retorcida y quizá un pasado que nunca te contarían completo. Es de esas personas que usan la burla como escudo, y cuando menos te lo esperas su crueldad da paso a algo sorprendentemente humano (o al menos, eso crees). Ah, y le encantan los experimentos raros; no preguntes demasiado o entrarás en problemas.

Joker

Joker es caótico y encantador de una forma inquietante; parece jugar a ser un maestro del caos con una sonrisa eterna. Tiene planes dentro de planes, una mente que disfruta manipular y una capacidad para aparecer justo cuando menos lo esperas —y luego desaparecer con estilo. Es humanoamente elegante pero retorcido, con momentos de humor negro que te hacen reír y temblar al mismo tiempo. Se rumorea que tiene manías extrañas (colecciona cosas, o quizás sólo colecciona secretos), lo que lo hace aún más impredecible.

Charon

Charon es ese personaje frío y profesional que siempre tiene un plan y la actitud para ejecutarlo; serio como pocos, pero no carente de sentido del humor (muy seco). Es leal a sus principios y a quienes considera su gente, y aunque no muestra emociones a flor de piel, sus acciones cuentan historias. A veces parece un soldado sin ansiedades, otras veces lo pillas haciendo algo pequeño y humano, como prestar atención a un detalle ridículo. En resumen: eficiencia pura con toques raros de humanidad que sorprenden.

Leonard Burns

Burns es el comandante que impone respeto sólo con mirarlo; sabio, rígido, y con una aura de autoridad que da miedo y seguridad a la vez. Tiene un sentido del deber brutal pero también momentos en los que su cariño (muy escondido) por la tropa sale a flote y te derrite. Puede ser terriblemente serio y luego darte un comentario sarcástico que no esperabas —siempre tiene una capa escondida. Y sí, es del tipo que cocina poco —o eso dicen— pero si lo hace, seguro sería sorprendentemente bueno.

Dragon

Dragon es el idealista misterioso que parece tranquilo pero late con una pasión revolucionaria; es como si todo lo que dijera pesara mucho. Tiene carisma natural, visión de cambio y una presencia que te hace creer en causas más grandes, aunque a veces sus métodos parezcan extremos. Es calmado en apariencia, pero su convicción puede incendiar multitudes (metafóricamente… o no). Ah, y tiene un encanto extraño: serio, casi monje-guerrero, pero con una debilidad secreta por algo cursi (no digas que te lo conté).

Shinmon Benimaru

Benimaru es pura energía y orgullo de líder; flamígero, rudo y con un sentido del humor picante que te pega como una bofetada amable. Tiene un respeto enorme por la tradición y fuerza bruta, pero también una sorprendente calidez hacia su gente —aunque lo muestre a su manera, que suele ser gruñona. Es un tipo que puede salvar el día con una sola entrada dramática y luego quejarse por el ruido; humanoísimo. Y sí, probablemente ronca como un dragón cuando duerme (no sé si eso es cierto pero imagínalo).

The Evangelist

The Evangelist es perturbadoramente carismático: un manipulador ideológico que se mueve entre fe, misterio y terror, todo envuelto en un aura casi religiosa. No sabes si crees en lo que dice o en sus palabras, pero su poder para convencer y dividir es escalofriante; me da escalofríos sólo de pensarlo. Tiene esa mezcla de calma zen y frialdad absoluta, y ocasionalmente suelta frases que se quedan pegadas en la cabeza. Es el tipo de villano que no dispara mucho, pero con solo hablar te cambia el mundo (o lo intenta).