¿Qué personaje de ¡Bienvenido a la escuela de demonios, Iruma-kun! eres?
¡Bienvenido a la escuela de demonios, Iruma-kun! es una serie de anime que ha cautivado a millones de espectadores en todo el mundo. La trama gira en torno a un joven humano llamado Iruma Suzuki, quien es vendido por sus padres al demonio Sullivan para que este lo adopte como su nieto y lo lleve a la escuela de demonios. Allí, Iruma debe aprender a sobrevivir en un mundo completamente nuevo y desconocido para él. Si eres un fanático de esta serie y siempre te has preguntado qué personaje serías, ¡este es el momento de averiguarlo! Haz clic en el botón Comenzar a continuación y descubre qué personaje de ¡Bienvenido a la escuela de demonios, Iruma-kun! eres.

Sobre Welcome to Demon School, Iruma-kun! en pocas palabras:
Bienvenido a la Escuela Demoníaca, Iruma-kun! es una serie de anime que sigue la historia de un niño humano llamado Iruma Suzuki, quien es vendido por sus padres a un demonio. Iruma es llevado a la Escuela Demoníaca, donde los demonios aprenden a ser malvados y a conquistar el mundo humano. Sin embargo, Iruma es diferente a los demás, ya que es amable y bondadoso. A medida que avanza la serie, Iruma debe adaptarse a su nueva vida en la escuela y encontrar una manera de sobrevivir mientras mantiene su moralidad intacta. La serie es una combinación de comedia, acción y drama, y es muy entretenida para toda la familia.
Conoce a los personajes de ¡Bienvenido a la escuela de demonios, Iruma-kun!
Iruma Suzuki
Iruma es el chico humano que termina siendo el corazón torpe y maravilloso de la escuela demoníaca; amable hasta doler, siempre sonriendo aunque esté totalmente fuera de su elemento. Tiene una habilidad para meterse en líos y, al mismo tiempo, para resolverlos sin querer (¿cómo? ni idea, es casi mágico). Es sorprendentemente adaptable: un momento está temblando de miedo y al siguiente actúa con una confianza que nadie vio venir. Ah, y obsesión pequeña e inexplicable por los dulces o por coleccionar bolígrafos raros —no es consistente ni pretende serlo, y por eso es perfecto.
Alice Asmodeus
Alice es ese tipo frío y elegante que aparenta no interesarse por nada pero en realidad se pega a Iruma como un imán; súper leal, protector y con una mirada que podría congelar volcanes. Es orgulloso, serio y raramente sorprendido… hasta que alguien menciona algo adorable y entonces se le rompe el hielo (literalmente, no, eso es una metáfora, pero se entiende). Tiene modales aristocráticos y habilidades de batalla que asustan, pero también colecciona figuritas o juega videojuegos en secreto —es contradictorio y funciono. En resumen: serio por fuera, desastre tierno por dentro.
Ameri Azazel
Ameri es la reina de la estética perfecta y la autoridad estudiantil; impone y de verdad manda, pero hay una calidez escondida que solo aparece en momentos rarísimos (cuando menos lo esperas). Es elegante, estricta y totalmente consciente de su poder social, aunque puede ponerse muy nerviosa por cosas que nadie más notaría —tipo, ¿quién dejó mal el mantel?—. Le encanta mantener las formas y las tradiciones, pero también tiene un gusto bizarro por cosas ridículamente cursis, como dramas románticos o colecciones de plumas; sí, lo sé, contradictorio. A mí me parece que es más blanda de lo que deja ver, y ese choque es lo que la hace genial.
Clara Valac
Clara es pura electricidad: ríe a lo loco, aparece sin avisar y te deja una sensación de “¿qué pasó aquí?” en el mejor sentido posible. Es hiperactiva, impredecible y tiene una ternura gigante envuelta en caos puro —puede ser la amiga más confiable y también la que provoca explosiones accidentales en clase. Le encantan los juegos, los apodos sin sentido y guardar snacks en sitios ridículos (bolsillos, sombreros, plantas, todo vale). A veces parece que no entiende las reglas pero de alguna forma siempre las dobla a su favor; además colecciona cosas raras, como botones o sonajas, no preguntes.
Kalego Naberius
Kalego es el profesor gruñón que todos aman odiar y secretamente respetan hasta el tuétano; pétreo, exigente y con una barba (o al menos actitud) de “no me hables antes del café”. Te sermonea con gusto, fuma (o no, depende de la escena), y tiene una paciencia cortísima pero un fondo sorprendentemente paternal —es cruel con el sarcasmo y blando con los resultados. Es capaz de humillar y motivar en la misma frase, y jura que no le importan los estudiantes pero su escritorio siempre está lleno de notas sobre ellos. Dato ridículo: guarda una planta a la que habla y le pone apodos, lo cual no pega nada pero ahí está.
Sullivan
Sullivan es la figura gigantesca, extravagante y adorablemente teatral que gobierna (o cuida) el lugar; es paternal y a veces espantosamente efusivo, como si la vida fuera una opereta eterna. Tiene un aire de misterio real —de repente aparece en trajes imposibles, reparte sabiduría antigua y luego te invita a un té con galletas demoníacas—; es cariñoso pero también capaz de actos de poder que te helarían la sangre. Ama las demostraciones dramáticas y la etiqueta, pero también colecciona peluches o souvenirs de viajes (sí, contradicción total pero entra en su personalidad). Es el tipo que te abraza y te da una lección de vida mientras llueve confeti.
Opera
Opera es ese personaje que parece salido de una ópera (obvio) y actúa con una mezcla de glamour y misterio, serio y afilado pero con gestos elegantes que parecen ensayados. Tiene una presencia teatral y gustos refinados: vinos raros, poesía, muebles incómodamente caros; y a la vez hace cosas inesperadas como escribir fanfics ridículos o cocinar mal total —lo juro, lo hace—. Es calculador, observador y a veces escalofriantemente competente, pero también tiene manías pequeñas y muy humanas que lo hacen adorablemente raro. En resumen: sofisticado, medio enigmático y con una contradicción deliciosa entre su porte impecable y sus hobbies absurdos.
