Sobre Charlotte en pocas palabras:

Charlotte es una serie de anime que sigue la vida de Yuu Otosaka, un joven con habilidades sobrenaturales que utiliza para engañar y manipular a los demás. Sin embargo, su vida cambia cuando conoce a Nao Tomori, quien lo invita a unirse a su organización de estudiantes con habilidades especiales. Juntos, luchan contra una organización gubernamental que busca controlar a aquellos con poderes sobrenaturales. La serie explora temas como la amistad, la responsabilidad y la moralidad, mientras presenta personajes interesantes y una trama emocionante.

Conoce a los personajes de Charlotte

Medoki

¡Medoki es ese bicho adorable y medio raro que siempre aparece en los momentos más inesperados! Es como una mascota/mascota mental que te hace reír pero también da un poquito de miedo cuando se queda en silencio, ¿no? Tiene gestos exagerados y a veces parece saber más de lo que dice — o tal vez sólo soy yo que le atribuyo poderes ocultos, quien sabe. Lo imagino con una voz chillona pero luego recuerdo que también puede sonar ominosamente seria, así que todo vale con Medoki.

Oikawa

Oikawa es el tipo elegante que finge no importarle nada pero secretamente controla la situación, tipo marionetista con sonrisa perfecta. Tiene un magnetismo raro: la gente lo mira aunque él finja aburrirse; y sí, suele soltar comentarios sarcásticos como si fueran caramelos envenenados. A veces es un héroe silencioso y otras un desastre encantador, no hay punto medio, lo cual lo hace imposible de ignorar. Ah, y siempre pienso que tiene un accesorio absurdo, como una bufanda que nunca se quita, aunque puede que me lo invente.

Nao Tomori

Nao es puro fuego: mandona, brillante y con un plan para todo, la típica presidenta estudiantil que no acepta un no por respuesta. Tiene ese look frío pero claramente blando por dentro —lo verías sacrificando su orgullo por alguien en un segundo—, y su sarcasmo es básicamente su idioma nativo. Le encanta llevar la iniciativa y luego negar que estaba emocionada, ya sabes, tsundere clásico pero mucho más práctica. Ah, y juraría que colecciona bolígrafos raros o que ronca de noche, no sé por qué me lo imagino así, pero queda bien.

Misa Kurobane

Misa es la amiga comprensiva con un sentido de humor seco que aparece cuando menos te lo esperas; amable pero con un filo en las palabras. Es el tipo que te escucha y te suelta una verdad incómoda con una sonrisa, y por eso la quieres aunque a veces te haga enrojar. Tiene una estética discreta, parece no llamar la atención pero siempre tiene detalles que la hacen única —como una pulsera torcidita o una nota enrollada en el bolsillo—. Y sí, me parece que cocina raro pero se niega a admitirlo, porque tiene orgullo culinario inexplicable.

Yu Otosaka

Yu es el protagonista desganado que te atrapa: vive medio distraído, habla en modo sarcasmo, y aun así tiene un corazón gigante escondido bajo capas de apatía. Es impredecible: puede hacer una tontería épica un minuto y ser sorprendentemente serio al siguiente, y eso lo hace entrañable. Aparenta despreocupación pero cuando importa se vuelve sorprendentemente valiente y obsesivo con las personas que quiere. Ah, además siempre imagino que tiene auriculares colgando del cuello, aunque a veces creo que no los usa nunca, es confuso pero clásico Yu.

Ayumi Otosaka

Ayumi es la hermanita dulce que sabe exactamente cuándo darte un abrazo y cuándo darte un empujón, mezcla de ternura y mala leche adorable. Parece frágil pero tiene una paciencia de hierro y una lealtad que te pone la piel de gallina; además, su risa es contagiosa y me la imagino con mil peluches, sí, mil. A veces se muestra tímida y otras sorprendentemente mandona con su hermano, lo que siempre me hace sonreír porque es tan humana. Y no sé por qué, pero la visualizo cocinando galletas horribles que insiste en que son perfectas; la imagen me encanta.

Shunsuke Otosaka

Shunsuke tiene ese aura tranquila de quien ya ha visto tanto que poco lo sorprende, pero ojo, no es frío, es más bien sereno y misterioso. Es el hermano mayor que cuida desde la distancia y que hace bromas secas que te pegan directo en el estómago, tipo sabio excéntrico. A veces actúa como si nada, y otras se revela con gestos inesperados de cariño que te derriten —es un vaivén y por eso lo adoro. Y juro que en mi cabeza tiene una fijación por el café y por cantar en la ducha, aunque no sé si eso es fanfic mío o canon.