Sobre One Piece en pocas palabras:

One Piece es una serie de anime y manga creada por Eiichiro Oda. La historia sigue las aventuras de Monkey D. Luffy, un joven pirata con habilidades sobrenaturales después de comer una fruta del diablo. Luffy se une a una tripulación de piratas llamada los Sombreros de Paja y juntos navegan por el Grand Line en busca del tesoro más grande del mundo, el One Piece. A lo largo de su viaje, se enfrentan a enemigos poderosos, hacen nuevos amigos y descubren secretos sobre el pasado de Luffy y su familia. La serie es conocida por su humor, acción emocionante y personajes memorables.

Conoce a los personajes de One Piece

Monkey D. Luffy

Luffy es puro imán de caos y alegría, un tipo que sonríe como si no existieran problemas —y luego los resuelve a puñetazos (literal). Es el capitán que confía con todo el corazón, a veces hasta en gente que apenas conoce, lo cual es adorable y totalmente peligroso. Ama la carne, las aventuras y dormir en cualquier lado; curiosamente es malísimo con los cuchillos pero un experto en mandar a volar a enemigos gigantes. Ah, y sí, es increíblemente simple y a la vez sorprendentemente profundo cuando habla de la libertad —no lo esperabas, ¿verdad?

Roronoa Zoro

Zoro es el samurái perdido que siempre dice “voy por ese camino” y termina perdido tres calles más tarde, pero de algún modo siempre aparece cuando más lo necesitas. Impone con sus tres espadas, su mirada clavada y esa mezcla de disciplina y obstinación que asusta y enamora a la vez. No confía en nadie fácil, excepto en sus nakamas y en sake, que tiene una relación seria con los tragos fuertes (sí, bebedor clásico). Es taciturno, leal hasta la muerte y absurdamente propenso a meterse en peleas imposibles; no te fíes de su calma, por dentro es fuego.

Mr. 7

Mr. 7 suena a nombre de villano de cómic y, honestamente, lo es: misterioso, un poco torpe, con manías raras (colecciona sellos, o eran botones? bueno, algo así). No es de los más famosos, pero tiene una presencia que se siente como una nota discordante en la tripulación de enfrente, un comodín que aparece cuando menos lo esperas. Tiene un aire burocrático —como si llevara una libreta para anotar crímenes— pero también exagera su importancia, que es divertido más que peligroso. A veces parece calculador, otras un simple títere de su propio ego; no lo subestimes pero tampoco lo idealices.

Nami

Nami es una mezcla letal de inteligencia práctica y ambición por el dinero que parece fría hasta que te das cuenta de que en realidad cuida con una pasión casi maternal. Navegante con alma de ladrona (en el buen sentido), no hay mapa que no quiera descifrar ni tesoro que no quiera anotar; es adicta a las cifras, y a las naranjas de su isla, claro. Tiene una capacidad para manipular situaciones que te deja pensando “cómo lo hizo” y luego tienes que admitir que funcionó. A veces parece calculadora, otras se desarma con una canción triste; humana, calculada y romántica a su manera.

Usopp

Usopp es el amigo que te cuenta la historia más imposible y, por alguna razón, le crees aunque sepas que exagera; esa es su magia. Tirador increíblemente ingenioso y creador de artilugios, mezcla inventiva con cobardía que se convierte en valentía cuando importa —y sí, llora mucho, pero también inspira. Tiene el mejor sentido del humor para romper la tensión, y una habilidad para la improvisación que salva vidas (literalmente). Es un mentiroso adorable y un héroe real cuando la situación se pone fea; contradictorio, sí, y por eso lo amamos.

Roronoa Zoro

Zoro otra vez, porque qué puedo decir, es imposible no hablar de él dos veces; es más que un espadachín serio: es la roca que tropieza, literalmente (se pierde pero no se rinde). Vive por su código, por su entrenamiento y por esas promesas que hace con ojos de acero; es brutal en combate y sorprendentemente dulce en momentos rarísimos. Le encanta el reto y desprecia la debilidad, aunque secretamente aprecia un buen descanso y un pedazo de carne. Si buscas a alguien que te defienda hasta el final y además te haga reír sin querer, ahí está Zoro.

Sanji

Sanji es el chef romántico, el tipo de hombre que pelea por una receta como si fuera una nación entera en peligro, y que abriría su corazón (y su cocina) por una dama en apuros. Es elegante, locuaz con las piernas y dramático con los pañuelos; los puros, las patadas y las declaraciones amorosas son su marca registrada. Tiene un código de honor con las mujeres que a veces raya en lo cómico, pero también hay una ternura enorme debajo del humo. Odia pelear con las manos porque no quiere dañar sus preciadas manos de chef, lo cual es absurdo y fantástico a la vez.

Tony Tony Chopper

Chopper es básicamente una bola de ternura con licencia médica: reno, doctor, adorable y muy serio cuando se trata de salvar vidas. Se transforma, se sonroja, se confunde y aclara todo en un segundo —es la definición de adorable pero competente. Ama los dulces (o eso parece), y su timidez es casi una estrategia para sorprender a quien lo subestima; cuidado, que pica. A veces actúa como niño, otras como profesional frío, y eso lo hace hipnótico y totalmente único.

Monkey D. Luffy

Luffy otra vez porque bueno, ¿cómo no? Siempre el mismo imán de problemas y risas, con esa fascinante capacidad de convertir una idea loca en leyenda en diez minutos. La lealtad es su corazón y la libertad su lema; no planifica mucho, pero sus decisiones son puras y terriblemente efectivas. Es increíblemente fuerte y ridículamente despreocupado, come como un ogro y duerme en lugares horribles —y aún así, lidera de forma natural. Hay una simpleza en él tan honesta que duele, y por eso lo adoras o lo temes (o las dos cosas).

Nico Robin

Robin es esa mezcla peligrosa de calma fría y curiosidad insaciable por la historia del mundo; arqueóloga con sentido del humor seco y una tristeza que lleva como abrigo. Lee antiguos textos como otros coleccionan novelas, y sus manos tienen más secretos que una biblioteca cerrada; suave pero mortal cuando actúa. Tiene una ironía deliciosa, una inteligencia que intimida y un corazón que se abre despacio (pero se abre). A veces parece distante, otras revela un cariño profundo por sus compañeros y por la memoria de la gente olvidada.

Gold Roger

Gold Roger, el Rey de los Piratas, suena a leyenda y lo es: carismático, temerario y con ese don de convertir su muerte en promesa —hola, Romance Dawn. Era el tipo que reía frente al destino, que quería que el mundo fuera tal vez más salvaje y honesto; líder natural con un brillo en los ojos. Tenía secreto, grandeza y una pizca de crueldad romántica; dejó su tesoro como un mapa a la libertad, no como simple codicia. A veces cruel, a veces generoso, siempre inolvidable; cada historia sobre él parece más grande que la anterior, ¿no es perfecto?