Sobre Fate/Stay Night en pocas palabras:

Fate/Stay Night es una serie de anime basada en una novela visual japonesa. La historia sigue a Shirou Emiya, un joven que se ve envuelto en una guerra entre magos por el Santo Grial, un objeto que puede conceder cualquier deseo. Shirou se une a Saber, una guerrera mítica, para luchar contra otros magos y sus propios demonios internos. La serie explora temas como la identidad, la lealtad y el sacrificio, y presenta una animación impresionante y una banda sonora épica. Fate/Stay Night es una experiencia emocionante y emocionalmente impactante que cautivará a los fanáticos del anime y la fantasía.

Conoce a los personajes de Fate/Stay Night

Shirou Emiya

Shirou es ese tipo que te rompe el corazón y luego lo cose con cinta adhesiva, puro idealismo y terquedad a prueba de bombas. Siempre quiere salvar a todo el mundo —a veces hasta a costa de sí mismo— y lo hace con una mezcla de torpeza encantadora y una determinación que da miedo. Tiene manías raras (cocina pésimo pero insiste en preparar ramen; también arregla cosas con pegamento y un poco de fe). Es un héroe muy literal y un poco ingenuo, pero cuando se pone serio se vuelve inquietantemente competente.

Saber

Saber es la imagen misma de la nobleza: orgullosa, disciplinada y con una espada que habla por sí sola, pero también tiene un lado tierno que aparece cuando nadie lo espera. Es seria, distante y de principios inquebrantables; pero ojo, le encantan los pasteles —sí, en serio— y a veces se la puede pillar siendo casi doméstica (casi). Tiene un honor que complica todo y una paciencia que se agota muy despacio pero se acaba. Es la clásica líder fría con corazón cálido escondido, aunque se niegue a admitirlo.

Rin Tohsaka

Rin es fuego con un corsé perfectamente ajustado: astuta, orgullosa y demasiado práctica para su propio bien, pero también increíblemente expresiva cuando se enfada (lo que ocurre mucho). Es una maga con cabeza fría y recursos infinitos, ama el orden y los gemelos brillantes y guarda secretos como si fueran joyas. A veces parece calculadora y luego suelta una broma malísima y te gana en simpatía sin querer. Tiene el síndrome “soy responsable pero también tengo un lado caprichoso” y eso la hace maravillosa.

Archer

Archer es sarcasmo en estado puro, el tipo que te mira y ya tiene un comentario afilado listo; cínico, cansado del romanticismo y mortalmente eficaz en combate. Se comporta como un veterano que lo ha visto todo, pero hay pedazos de melancolía que asoman y te hacen pensar que está roto por dentro (o a medias, no sé, es raro). Le gusta la comida sencilla, pero no le preguntes porque te contestará con ironía; y sí, guarda secretos pesados. Es la mezcla perfecta de “te doy clases” y “no me metas en tus dramas”, y aun así terminas queriendo saber más.

Sakura Matou

Sakura parece la chica dulce del barrio, tímida y reservada, pero hay capas y capas debajo que te sorprenden, a veces para bien y a veces para mucho peor. Es dulce, callada y con una fuerza emocional que se siente como una ola subterránea: adorable y peligrosa a la vez (sí, contradicción total, lo sé). Tiene hábitos sencillos, le gustan las flores y puede pasar de hablar bajito a dejarte sin aliento en un segundo. Es triste y esperanzadora, muy compleja, y casi siempre trae consigo una sensación de que algo grande está por estallar.

Rider

Rider es puro carisma en tacones, sensual y misteriosa, siempre con una sonrisa ladeada y esa aura de reina que no solicita permiso. Es una viajera nata, independiente, un poco salvaje y con un sentido del humor retorcido; además, le encanta provocar (con estilo). A veces se comporta como una guardiana fiel y otras como una diva caprichosa que sólo aparece cuando quiere. Tiene mañas exóticas (gusta de dulces raros, o eso dicen) y un sentido del deber que se combina con un ego delicioso.

Illyasviel “Illya” von Einzbern

Illya es adorablemente peligrosa, una niña con cara de muñeca que guarda poderes y rencores como si fueran juguetes nuevos. Tiene un carácter infantil y petulante pero también momentos de sorprendente frialdad; se enoja y luego te ofrece galletas, con total naturalidad. Ama las cosas rosas y los peluches, y al mismo tiempo puede hacer magia que te deja sin voz —sí, contradicciones everywhere—. Es un paquete completo de ternura y amenaza, irracional y calculadora a la vez, lo cual la hace totalmente impredecible.

Kirei Kotomine

Kirei es la calma que te hiela la sangre, el sacerdote impecable con una sonrisa que no alcanza sus ojos; tranquilo, manipulador y con una curiosidad por el mal que asusta. Aparenta serenidad y piedad, pero por dentro disfruta de ver cómo se desmoronan los demás (y no lo admite jamás). Es metódico, elegante y terriblemente eficiente, y tiene un gusto extraño por las cosas simples —un té, un silbido— que contradice su naturaleza oscura. Es encantador en el peor sentido y no puedes evitar observarlo, aunque sepas que es peligroso.

Gilgamesh

Gilgamesh es un espectáculo dorado: arrogante, egocéntrico y absolutamente convencido de su propio derecho a todo, y aún así es imposible no mirarlo. Tiene una colección de tesoros (literalmente) y un sentido del humor cruel que hiere y divierte a partes iguales; manda y exige adoración. Es imperial, infantil cuando algo no va a su gusto, y sorprendentemente… honesto sobre cuánto se valora a sí mismo. Si fuera una comida sería algo exageradamente opulento y demasiado salado, pero irresistible.