Sobre Spriggan en pocas palabras:

Spriggan es una serie de anime y manga que sigue la historia de Yu Ominae, un joven agente de la organización ARCAM, que se dedica a proteger artefactos antiguos de la humanidad. La trama se desarrolla en una historia de ciencia ficción que involucra a una antigua civilización alienígena que busca controlar el mundo a través de artefactos antiguos. La serie está llena de acción, aventura y misterio, y sigue a Yu en su lucha por proteger el mundo de la amenaza alienígena. Con una animación impresionante y una historia emocionante, Spriggan es una serie que no te puedes perder.

Conoce a los personajes de Spriggan

Mirage

Mirage es ese personaje envuelto en misterio que nunca sabes si está jugando contigo o salvándote, en serio, es tan… enroscado. Frío y calculador pero con momentos de pura ternura que te pillan desprevenido; siempre con un gesto medio burlón y un humor negro que te mata. Es el tipo de persona que guarda mapas secretos y también una colección absurda de muñequitos de plástico en su mochila, no preguntes por qué. A veces parece traicionar a todos, otras veces sacrifica lo imposible, y no sabrás nunca si eso es noble o simplemente parte de su juego.

Jean Jacquemondo

Jean Jacquemondo es el típico genio con aires aristocráticos y un ego que necesitaría su propio escalón. Tiene esa mezcla de caballerosidad francesa y crueldad científica, siempre con un cigarro (o era un palillo?) y un dedal de paciencia muy corta. Ama la precisión, pero jura que una vez improvisó una bomba con chicles y un reloj de pulsera, y te lo cuenta riéndose como si fuera una anécdota. A veces es monstruo, a veces mentor, y siempre el tipo que roba la escena sin pedir permiso.

Yuu Ominae

Yuu es el héroe a regañadientes que me rompe el corazón con su normalidad maldita; parece cualquiera y luego pum, acción. Tiene esa mezcla de chico común y determinación implacable, además de un sentido del humor tímido que aparece en los peores momentos. Leal hasta el extremo, capaz de ponerse en peligro por alguien que apenas conoce, y estúpidamente romántico a veces, aunque niegue todo. No es perfecto: duda, fracasa, se enfada, pero es justamente eso lo que lo hace heroicísimo y real, y también siempre lleva una chaqueta que huele a viejas bibliotecas.

Colonel MacDougall

El Colonel MacDougall es la autoridad viviente, todo disciplina, voz grave y un pasado que pesa más que su uniforme. Tiene maneras de hierro, ama los planes y odia las sorpresas, aunque curiosamente guarda una colección de relojes rotos que nadie entiende. No es malvado por gusto, sino por convicción profesional, y cuando se enfada parece que va a reorganizar el mundo a su gusto. Hay algo trágico en él, una ternura escondida bajo esa coraza militar, y a veces se le escapa un gesto humano que lo vuelve sorprendentemente cercano.

Yoshino Somei

Yoshino Somei es dulce y misteriosa al mismo tiempo, como un jardín nocturno: tranquila en la superficie, con raíces que no ves. Tiene una empatía inmensa y a veces parece que puede leer las estaciones del alma de la gente, aunque no sabría explicar cómo. Es reservada pero no fría; guarda secretos pero también confía en gestos pequeños, tipo dejar una nota o una moneda en un bolsillo. A veces es fuerte hasta el punto de romperte, y otras se derrumba por algo pequeñísimo; contradictoria, sí, y eso la hace entrañable.

Director Yamamoto

El Director Yamamoto es el típico cerebro institucional: calmado, calculador y con una paciencia que da un poco de miedo. Tiene un gusto por los procedimientos y los informes interminables, pero también contadas veces suelta una sonrisa que desarma la sala entera. Sabe mover piezas en la sombra, y aunque parezca un funcionario gris, guarda principios férreos y un pasado que lo volvió así—o eso dicen. A veces parece que no siente nada, y al siguiente minuto te demuestra que sentía demasiado; es muy paciente y se cocina en silencio, literal y metafóricamente (dicen que hace una sopa buenísima).

Maria Clementi

Maria Clementi es fuego; apasionada, directa y con una risa que te obliga a prestarle atención. No se anda con rodeos, pelea por lo que cree y tiene un sarcasmo afilado que corta como cuchillo, pero también un montón de inseguridades pequeñas que esconde con maquillaje. Es experta en negociar con gente peligrosa y en romper corazones por accidente, y sí, colecciona postales antiguas de lugares que nunca visitó. A veces actúa sin pensar y otras planea hasta el último detalle; impredecible y entrañable, casi humana en su perfección imperfecta.