Sobre The Last Ship en pocas palabras:

The Last Ship es una serie de televisión estadounidense que se centra en la tripulación del buque de guerra USS Nathan James, que se encuentra en una misión para encontrar una cura para un virus mortal que ha diezmado gran parte de la población mundial. La serie sigue a la tripulación mientras luchan contra enemigos internos y externos mientras intentan mantener la esperanza de encontrar una cura para la enfermedad. A través de la acción, el drama y la intriga, The Last Ship ofrece una emocionante y apasionante historia de supervivencia y determinación en un mundo post-apocalíptico.

Conoce a los personajes de The Last Ship

Tom Chandler

Tom es el clásico capitán que siempre parece tener tres pasos de ventaja y una mirada que dice “confía en mí” (aunque a veces no quieras). Es estoico, moral hasta lo doloroso y un líder que prefiere dar el ejemplo antes que ordenar, pero sí, también tiene sus explosiones de furia contenida — súper humano. Le rompieron cosas importantes en la vida (familia, pierna, paz mental), y sin embargo sigue siendo el que toma la decisión imposible a las 3 a.m. Ah, y es sorprendentemente torpe con regalos; cada vez que intenta ser romántico sale mal de forma adorable.

Mike Slattery

Slattery es ese tipo que pasa de capitán a presidente y nadie se sorprende porque respira autoridad natural, carisma y mala suerte romántica, todo mezclado. Es práctico, razonable y con un sentido de la responsabilidad que asusta; no es un héroe crepuscular, es más bien el que paga las facturas del mundo. Le encanta bromear para relajar a la gente pero cuando hay que ponerse serio, se vuelve una roca — o una roca con sarcasmo, lo que es mejor. A veces parece que odia los discursos (y en realidad los odia), pero después da uno épico y todos lloran.

Jeter

Jeter es el joven idealista del barco, ese que todavía cree en reglas y en que todo se arregla con más café y menos drama. Tiene una energía contagiosa y se mete en líos por valentía más que por estupidez (aunque hay momentos). Le encanta modelar barquitos en miniatura, lo cual es ridículamente apropiado y también un poco raro; jura que lo calma.

Danny Green

Danny es el ingeniero con alma de DJ y corazón de perro leal, el tipo que arregla el reactor y cuenta chistes malos mientras lo hace. Es práctico, ingenioso, y a menudo la voz de la sensatez entre tanto melodrama militar; también llora con películas que nadie más admite ver. Tiene orgullo profesional y un sentido del humor negro que te salva de la desesperación, aunque en el fondo es demasiado sensible (y sí, colecciona llaves viejas por “motivo sentimental”).

Kara Foster

Kara es fuego puro: rápida, brillante, y con un talento para la logística y el combate que te deja boquiabierto; además, maneja gente sin que parezca que manda. Es independiente a tope pero sorprendentemente tierna con los que considera su gente (y sí, tiene un lado maternal que aparece cuando menos te lo esperas). Le molan las decisiones difíciles (eso suena raro pero es verdad) y desprecia la hipocresía con pasión. Ah, y a veces trae galletas caseras al puente; no preguntes cómo combina eso con su cara de sargento.

Carlton Burk

Burk es la definición de sombra y filo: operativo, frío, eficaz y con moral borrosa, ese personaje que te da miedo pero no puedes dejar de mirar. Tiene un profesionalismo casi militar-zen (irónico) y un sentido del deber que lo empuja a cruzar líneas que otros ni se imaginan. Le encanta el orden pero vive en el caos; colecciona casquillos de bala por “recuerdos” y a la vez colecciona libros de poesía, lo cual es ridículamente humano.

Miller

Miller es el tipo de tripulación que hace que todo funcione: práctico, sarcástico, con manos que arreglan cualquier cosa y una paciencia que parece infinita (hasta que no). Es fiel hasta el hueso y su sentido del humor salva turnos enteros, pero ojo: guarda rencores como si fueran recetas familiares. Tiene gestos sorprendentemente dulces —por ejemplo, regala chicles en situaciones de estrés— y es más sentimental de lo que admite.

Alisha Granderson

Alisha es la científica que no necesita capa para ser heroína: brillante, obsesiva con los datos y con una empatía que a veces le complica la vida. Es la persona a la que vas cuando quieres respuestas, aunque te responderá con un gráfico y una broma rara en el mismo paquete. A veces parece fría por su rigor, pero se le rompen las máscaras con una sola historia triste; colecciona notas adhesivas como si fueran trofeos (sí, demasiadas notas).