Sobre Trigun en pocas palabras:

Trigun es una serie de anime y manga que sigue la historia de Vash the Stampede, un hombre misterioso con una recompensa de 60 mil millones de doblones en su cabeza. La serie se desarrolla en un mundo post-apocalíptico donde la civilización ha colapsado y la mayoría de la gente vive en ciudades y pueblos aislados. Vash es perseguido por un grupo de mercenarios y cazadores de recompensas, pero su verdadera naturaleza y propósito se revelan gradualmente a lo largo de la serie. Con un estilo de animación distintivo y personajes memorables, Trigun es una serie de culto que ha ganado seguidores en todo el mundo.

Conoce a los personajes de Trigun

Legato Bluesummers

Legato es ese tipo que te encanta odiar y odiar amar, ¿sabes? Tranquilo, educado, con voz de terciopelo pero capaz de romperte la vida con una sonrisa. Le encanta manipular, parece frágil como porcelana y a la vez tiene una sed de caos que da miedo; es súper leal a Knives, como raro romanticismo oscuro. A veces recuerdo que colecciona hojas, y otras veces jura que no, así que no preguntes — sólo disfruta el drama.

Nicholas D. Wolfwood

Wolfwood es el cura con una cruz enorme que dispara, y esa imagen sola ya es un poema de contradicciones. Cínico, cansado, aunque secretamente buenazo; mantiene un código moral propio que te rompe el alma y también te hace reír. Le gusta fumar, comer pasteles raros (creo que le gustan los dulces — o era café?) y cargar culpas como quien carga la cruz que pesa más que él. A veces parece duro y otras veces es un peluche peligroso; héroe anti-héroe, siempre un poco desordenado.

Midvalley the Hornfreak

Midvalley es la persona más excéntrica del grupo, toca una corneta/fanfarria y actúa como si estuviera en un carnaval nocturno aunque todo esté quemado alrededor. Es impredecible, un showman macabro que disfruta provocar más que pelear, aunque cuando se enoja puede ser bastante serio, sí. Tiene esa vibra de artista loco que colecciona máscaras y dice frases poéticas a las plantas; a veces da miedo, otras veces te hace querer bailar. Ah, y creo que se come las partituras cuando está triste — o eso inventé, pero suena bien, ¿no?

Vash the Stampede

Vash es puro caos adorable: payaso, genio de las armas y pacifista de corazón ridículamente tierno. Siempre con sonrisa, trucos raros y un sentido del humor que te salva y te rompe al mismo tiempo; no quiere matar nunca, pero es capaz de cosas imposibles para proteger a los demás. Tiene un pasado enorme —trauma gigante— y una culpa que lo sigue como sombra, pero intenta vivir feliz, come pastelitos (o tal vez son donas, juro que es donas) y abraza a todo el mundo. Es brillante, contradictorio y absolutamente inolvidable; te hará llorar y reír en la misma escena.

Rai-Dei the Blade

Rai-Dei es la navaja afilada con pies, un guerrero silencioso que vive por el acero y la precisión. Frío y elegante, parece bailar cuando pelea; honorístico en plan samurái moderno, pero con un humor extraño que sólo aparece en momentos impares. Ama las espadas (obvio), pero también tiene un lado raro —le gustan las flores, o al menos eso dice— que lo hace más humano. No es muy hablador, pero cuando abre la boca su frase pesa tanto como su hoja; peligro bello.

Millions Knives

Knives es el genio cruel y calculador, el otro yo de Vash pero con toda la mala leche despeinada posible. Frío, superior y terriblemente inteligente; desprecia a la humanidad con una calma que hiela y disfruta jugar con sus marionetas humanas. Tiene una curiosidad casi infantil sobre lo que destruirá y cómo, lo cual lo hace aún más aterrador porque es metódico, no histérico. Algunas veces parece un niño aburrido que rompe juguetes, otras un filósofo con monóculo —es complejo y te deja sin aliento.

Dominique the Cyclops

Dominique da la impresión de estar siempre un paso por delante, con ese ojo único que te mira como quien evalúa un experimento. Elegante, fría y con una precisión casi clínica en todo lo que hace; le gusta la estética y las cosas ordenadas (postales, figuritas, cosas pequeñas que guarda en cajas). Pero ojo: debajo de esa fachada controlada hay ferocidad pura. A veces cuenta chistes malos en momentos inadecuados, lo cual es raro y genial; es como una obra de arte que te pega.

Monev the Gale

Monev es viento y violencia, impredecible y con una energía que te sacude como tormenta de arena. Es rápido, cruel y disfruta la pelea como quien respira; tiene un sentido de la libertad brutal, casi poético, aunque también es algo impulsivo —no piensa demasiado—. Le encanta el aire, literal, y se dice que tararea mientras ataca, lo cual es escalofriante pero también fascinante. A ratos parece un chico salvaje jugando y a ratos un huracán que no perdona; mezcla rarísima pero efectiva.