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¿Qué personaje de ‘Trolls’ eres?

¡Sumérgete en el colorido y mágico mundo de los Trolls para descubrir qué personaje resuena verdaderamente con tu personalidad! ¿Alguna vez te has preguntado si eres más como Poppy, lleno de positividad e inquebrantable optimismo, o Branch, con su perspectiva práctica y gruñona ocasional? ¿O tal vez eres uno de los muchos otros personajes vibrantes que llenan este universo? Sea cual sea el Troll que seas, cada personaje tiene su encanto único y peculiaridades que los hacen adorables. Entonces, ¿estás listo para descubrir tu Troll interior? ¡Desplázate hacia abajo y presiona el botón de inicio para embarcarte en este encantador viaje!

Bienvenido al cuestionario: ¿Qué personaje de Trolls eres?

Sobre Trolls en pocas palabras:

“Trolls” es una serie animada vibrante basada en la popular franquicia cinematográfica. Ambientada en un mundo fantástico, sigue las aventuras de la siempre optimista Poppy, el cauteloso Branch y una gran cantidad de otros personajes coloridos mientras navegan por los altibajos del Pueblo Troll. Con canciones pegadizas, valiosas lecciones sobre la amistad y la aceptación, y una buena dosis de humor, la serie cautiva a audiencias de todas las edades.

Conoce a los personajes de Trolls

Poppy

Poppy es la líder total, siempre con una sonrisa solar y esa energía que no sabes si abrazar o atarle una cuerda (es broma, no a la cuerda). Planifica fiestas como si fueran operaciones secretas y cree firmemente que un buen abrazo arregla casi todo, aunque a veces se quede en blanco ante problemas reales —y sí, a veces también se enoja, sorprendentemente rápido. Ama el rosa y el brillo pero, curiosamente, tiene una caja secreta de calcetines grises y sobrios que nadie entiende. En fin, contagiosa, un poco mandona, y con voz de “vamos, podemos” que te obliga a levantarte del sofá.

Branch

Branch es el gruñón adorable: siempre alerta, con un kit de supervivencia imaginario y una cara de “no hoy” que en realidad esconde mil preocupaciones. Es práctico hasta lo obsesivo, le dan miedo las sorpresas pero en el fondo tiene un corazón que late muy fuerte por los demás (sí, cliché, pero cierto). A veces actúa como ermitaño extremo y luego canta en la ducha como si fuera un musical, contradictorio hasta para él. Lo quieres por su honestidad brutal y porque, cuando protege, lo hace sin preguntar.

Chenille

Chenille (la fashionista-delgadez-twin, o al menos así la recuerdo) es pura actitud y glamour, siempre con telas, brillos y esa mirada de “¿ya viste mi outfit?” —aunque a la vez es sorprendentemente sentimental. Habla con gestos largos y parece que borda el mundo para que todo encaje, pero también puede ser dramática por cosas pequeñísimas (una hebra suelta le puede arruinar el día). Compartida, cariñosa con sus amigas y un poco diva, pero en el buen sentido: da consejos como si fueran regalos envueltos en lentejuelas. Ah, y a veces cambia de humor en medio de un chiste, así que cuidado, te confundirá y te encantará.

DJ Suki

DJ Suki vive en otra onda: siempre con auriculares, mezclando sonidos de la naturaleza con beats que te hacen mover aunque no quieras, y lo peor/más genial es que nunca está quieta. Es creativa hasta el tuétano, colecciona pequeños objetos que suenan bien (sí, hasta la caja de cereales vacía tiene ritmo) y tiene una sonrisa cómplice como si conociera el secreto para la fiesta perfecta. A la vez, es relajada y paciente, casi zen, pero si le tocas la mezcla te mira como si hubieras insultado a su abuela (con amor).

Biggie

Biggie es gigante y blando, el oso de felpa gigante que camina y habla poco, pero cuando lo hace te derrite el corazón —y lleva a Mr. Dinkles, su lombriz mascota, que es básicamente su alter ego y es imposible no quererlos a ambos. Tiene miedos ridículos (sí, le asustan las sombras) y manías dulces, colecciona cosas pequeñas en bolsillos enormes y ofrece abrazos que solucionan crisis existenciales, en serio. A veces parece torpe y luego te sorprende con una sensibilidad de poeta, y otras veces solo quiere comer muffins en silencio; contradicciones constantes, pero todo entrañable.